Las penas se reflejan es sus ojos color ámbar, mientas todo lo construido se cae sin aviso. Silenciosa y cruel, la angustia va conquistando su corazón haciendo que los deseos de dejar todo sean cada vez más frecuentes. Busca ansiadamente una mano amiga, pero siente que no es suficiente. Por que el odio acumulado en su interior la ciega y la hace sentirse sola.
Todo va en cámara lenta para ella, el brillo de las luces deja una estela en la noche, así como las relaciones pasadas marcan su corazón.
Hermosa, contempla el paso del tiempo contando las penas que afligen a su vida. Su dorados cabellos vuelan en el viento, y su mirada perdida busca algo a donde aferrar su fe. su mejillas derraman la evidencia de su mal estar, y las lágrimas que caen sobre su vestido blanco poco pueden hacer para liberarla. No puede más, siente que nada vale la pena ya, y que esta condenada a la infelicidad. Dobla sus brazos , abrazandose a si misma, sintiendo que por mas que todos la entiendan, poco pueden hacer por ella, mientras mira como una pareja camina de la mano. “¿por que pueden ser ellos felices y yo no?”, es lo que su afligido corazón le dice a su esperanza, y el llanto comienza a florecer. El viento se lleva las lágrimas, pero no el dolor.
Camina sin rumbo, buscando donde volver a empezar… pero mientras lleve su vestido blanco, su corazón no volverá a latir de felicidad
SOS MUCHO RAMIRO
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2 comentarios:
te quiero agustina. y estoy para vos. cualquier cosa ya sabes que voy a hacer lo imposible para hacer que estes mejor
ayayay
te amo
vita
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